La lectura de este primer bloque me ha resultado muy interesante. Te hace reflexionar sobre muchos aspectos. La diversidad es la realidad que nos encontramos dentro de las aulas, me refiero a que cada niño o niña es único, y esto es lo bonito, pero porqué enseguida que alguno no hace algo similar a la mayoría ya es diferente. Nosotros como docentes lo que debemos hacer es reconocer que cualquier pensamiento, respuesta o resolución es totalmente válida. ¿Qué pasa cuando algún niño o niña tiene dificultades para conseguir los objetivos? En estos casos lo ideal es la pronta detección para así poder subsanar a través de diferentes medios que los vaya consiguiendo y así conseguir esa "normalidad". En concreto en mi aula (4 años) hay distintos tipos de ritmos y el apoyo se realiza dentro de clase. Utilizo mucho el refuerzo positivo y destaco las características en las que cada alumno destaca.
Me ha gustado mucho el concepto del efecto Pigmalion, en parte yo creo que está relacionado con lo mencionado anteriormente. Si un alumno o alumna está escuchando desde pequeño que se le dan mal las matemáticas está claro que se le van a dar mal porque termina creyéndoselo. Por eso, si este efecto es positivo se pueden conseguir grandes cosas en nuestro alumnado, pero ser efecto.
Como conclusión decir que está claro que no podemos trabajar nosotros solos ya que estamos inmersos en diferentes sistemas que afectan a nuestro alumnado tal como habla la teoría sistemica y la teoría ecológica de Bronfenbrenner. Por lo tanto, toda la comunidad educativa que afecta a nuestro alumnado e incluso externo al centro como son los diferentes sistemas hay que tenerse en cuenta y trabajar todos juntos.